sábado, 16 de mayo de 2009

Controversia en torno a Gran Cuñado

Anibal Fernandez

El ministro de Justicia, Aníbal Fernández, pidió hoy públicamente "dejar a un costado" a la presidenta Cristina Fernández de la imitación que se hace de ella en el sketch televisivo "Gran Cuñado". También dijo que se arrepiente de haber usado la palabra "regulación" cuando habló de la conducta a seguir ante este tipo de programas.

"Hay algunos políticos que son hasta en la vida cotidiana personajes; pero, ¿no podemos dejarla un poquito al costado a la Presidenta, entre todos, incluida la producción de (Marcelo) Tinelli?", sostuvo Fernández.

En declaraciones a radio Mitre, el ministro aclaró: "Nadie está hablando de sacar un decreto, pero...". Anteayer, Fernández -quien también es imitado en el sketch- había considerado que la personificación que se hizo de la jefa de Estado tuvo momentos "bien logrados", pero con algunos "excesos".

"En algunas cosas me parece que hay excesos, debiera regularse, porque es la Presidenta, y en otras cosas, muy logrado: hay que ser justo con esas cosas".

Esta mañana, el ministro admitió que utilizó una "frase poco feliz" al mencionar la palabra "regular". "Me arrepiento de haber expresado (ese término)", reconoció.

Nik

La historia argentina tiene una riquísima trayectoria en cuanto a sátira política se refiere. Desde la publicación de El Mosquito (1863) o Caras y Caretas (1898), todos los presidentes de la Nación, sin excepciones, fueron retratados irónicamente en algún medio.

Basta rememorar casos notables como Tía Vicente de Landrú, los recordadísimos programas de Tato Bores, o el caso de la revista Humor , donde desfilaron en forma de caricatura todos los Presidentes de facto de la última dictadura militar.

En nuestra historia más reciente, las imitaciones de Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde han sido moneda corriente en los programas humorísticos de la televisión argentina. Esta semana, todos celebramos la vuelta del humor político a la pantalla chica de la mano de Marcelo Tinelli en el segmento "Gran Cuñado" luego de varios años de ausencia de este tipo de imitaciones.

En este contexto, el Ministro de Justicia de la Nación, Aníbal Fernández, declaró primero que la imitación de la Presidenta habría que "regularla" y hoy agregó sobre el tema que lo mejor sería "dejar a un costado" la caricatura de Cristina Fernández de Kirchner.

Uno de los valores indispensables de toda democracia es la libertad de expresión y el derecho de todos sus ciudadanos a informarse, enterarse o entretenerse.

Mucho dolor y mucha sangre nos costó a todos los argentinos recuperar estos derechos.

Justamente por eso, llaman aun más la atención estas declaraciones llegadas desde un gobierno que paradójicamente hizo de los derechos humanos una bandera, y que nos recuerda constantemente, y con razón, los males padecidos por nuestra sufrida República en las épocas oscuras en las que nadie podía expresar con libertad lo que realmente pensaba.

El autor es humorista político y guionista de "Gran Cuñado"

Martín Bossi

Es actor, bailarín y humorista. Pero el 2009 lo topó con un enorme desafío. Con 44 puntos de rating, Martín Bossi se convirtió en el imitador de la presidenta Cristina Kirchner en el sketch "Gran Cuñado" del programa de Marcelo Tinelli ShowMatch , que desvela desde el lunes pasado a los políticos argentinos.

Aunque se calificó como un "absoluto analfabeto político", reconoció que comenzó a interesarse por las cuestiones públicas desde que hace cinco meses se enteró de que le tocaría imitar a la Presidenta de la Nación.

(…)

En noviembre del año pasado se enteró que iba a hacer el personaje de Cristina Kirchner. Y desde hace cuatro meses lo prepara con intensidad. "Miro videos durante una hora y media por día. Y voy entrenando, tengo un cuerpo versátil y entrenado. Es el resultado de muchos años", relató.

Asimismo, advirtió: "Soy un francotirador. Trabajo de hacer personajes y al que me toca le pongo toda la energía. Ello requiere un análisis psicológico, de clase social, de género, de identificar la línea de pensamiento del personaje para poder actuarlo".

- ¿Le interesa la política? ¿Está al tanto de lo que ocurre?

- No, soy un absoluto analfabeto político. Preparando el personaje me fui enterando de cosas, me empecé a interesar. Además, me tengo que enterar para tener material para el personaje, pero nunca me atrajo la política.

- ¿Qué pensaba de Cristina como presidenta antes de tener que hacer la imitación?

- Nada en particular. Soy víctima de las cosas que hace bien y de las que hace mal, como todo el mundo.

- ¿Se encariñó con la Presidenta en los últimos meses?

- Me parece una mujer sumamente atractiva, interesantísima. Imaginate, cuatro meses conviviendo con ella? ¿Cómo no me va a parecer atractiva? Me atrae más cuando grita porque tiene más matices. Me encanta cuando grita como Evita. Me gusta cuando habla en espacios abiertos. También vi muchos discursos puertas adentro.

- ¿Lo reconocen por la calle?

- No mucha gente. A pesar de que hice más de 200 personajes en televisión, como siempre hice caracterizaciones, la gente no me conoce.

- ¿Cree que Cristina va a ser expulsada de la casa de "Gran Cuñado"?

- Obvio que no quiero que salga de la casa y quiero que el personaje dure la mayor cantidad de tiempo posible. Además, me parece que no le convendría porque quiere decir que mucha gente votó para echarla. Me muero si me voy, quiero explotar el personaje.

- ¿Qué opina de los cuestionamientos que hay alrededor del sistema de votación?

- Es un tema en el que no me meto, pero sí puedo decir que el sistema de votación es muy transparente.

- ¿Recibieron algún tipo de llamado o presión de la Casa Rosada antes o después de que salga al aire?

- No, no estoy al tanto que eso haya pasado. Lo que sí, Marcelo estuvo muy al tanto del proceso, lo siguió muy de cerca, obviamente por el contenido político.

- ¿Siente presión por estar imitando a la Presidenta de la Nación?

- Y... Es fuerte. ¿Imaginate estar imitando a la Presidenta con 44 puntos de rating? Ayer me quedé sin voz, claramente por eso, por el estrés de salir en vivo con tanta gente mirando.

- ¿Y a usted alguien lo llamó?

- No, nadie me llamó.

- ¿Recibió algún parámetro de cómo realizar la imitación?

- Siempre trabajé con absoluta libertad. De hecho, pude haber dicho cosas muy duras, pero ese no es mi tipo de humor. Yo trabajo parodiando con respeto. Mi humor es el de "argentinos y argentinas, dengues y «dengas»".

- ¿Cree que la Presidenta está conforme con la imitación?

- Estoy seguro de que le gusta.

- ¿Le gustaría conocer a Cristina?

- Sí, obvio que sí. ¿A quién no le gustaría?

- ¿Y qué le preguntaría?

- Y... cosas de la política, sobre el conflicto con el campo...

- ¿Y algo que tenga que ver con su personaje?

- Le preguntaría si se hace la planchita.

Elisa Carrió

La dirigente del Acuerdo Cívico y Social, Elisa Carrió, recorrió hoy Jujuy junto al titular de la UCR, Gerardo Morales, y aprovechó la ocasión para ironizar la sugerencia del ministro Aníbal Fernández de sacar a la presidenta Cristina Kirchner del programa Gran Cuñado.

"Si un dirigente político no resiste un programa de humor, no es dirigente", aseguró,, aseguró, al tiempo que dijo entre risas que "es la primera vez que coincide en algo con el gobierno nacional", ya que espera que la "saquen de la casa" cuanto antes porque no quiere "compartir nada con Hugo Moyano".

Carrió, Morales y otros dirigentes del ACS a nivel provincial realizaron una caminata por el barrio Alberdi de esta capital y luego, se fueron a la ciudad de San Pedro de Jujuy, donde realizaron un acto partidario.

En diálogo con los vecinos en una cancha de fútbol, la líder la Coalición Cívica destacó la necesidad de "dejar de hablar de la candidaturas testimoniales y debatir proyectos y propuestas que le sirvan a toda la gente".

Por su parte, Morales expresó que seguirán el recorrido por todo el país para "buscar el consenso y la concordia con todos y después del 28 de junio, luego de ganar, el matrimonio tendrá la obligación de escuchar a todos".

Analistas políticos

El sketch "Gran Cuñado" influirá en la elección del 28 de junio. Al menos, así lo afirman los encuestadores y los analistas políticos. Aunque aún no saben cuál será el impacto que tendrá sobre el electorado, los especialistas en comunicación política creen que hay dos razones que explican la atención y la tensión que despierta la sátira en los candidatos y el Gobierno.

La primera es que el programa de Marcelo Tinelli podría ser el único contacto con la política para una sociedad que aún no está interesada en las elecciones. La segunda es el recuerdo de la imitación a Fernando de la Rúa, en la que el ex presidente lucía dubitativo y torpe.

Hasta ahora, ninguno de los consultores midió el efecto de "Gran Cuñado" en las encuestas, pero tampoco dudan de su importancia para los próximos comicios.

Según Fabián Perechodnik, de Poliarquía, "el único vehículo de contacto de la sociedad con los comicios es un sketch de humor que, encima, mide 40 puntos de rating". Y subraya: "En un sistema normal sería sólo una sátira, pero en el imaginario de los políticos perdura el antecedente nefasto de De la Rúa".

De acuerdo con Jorge Giacobbe, "Gran Cuñado" tendrá un impacto "innegable" en el curso de las elecciones. "Está en todas las conversaciones y monopoliza el horario de la cena, el momento en que las familias deberían dialogar". Considera también "lógico" que se tema su influencia, principalmente, por el poder de penetración del programa.

Sin embargo, analizó como "ilógico" que "se pida clemencia" con la Presidenta. "Algún comité de intelectuales en la Casa Rosada debe creer que existe una intencionalidad de perjudicarla, como se creyó con De la Rúa", indica, pero advierte: "Si la sacan de la casa, la pueden martirizar o victimizar ante la opinión pública".

Analía del Franco, de Analogías, sostiene que el sketch incidirá en la elección, aunque limita el riesgo a que los imitadores agreguen cosas que no existen en el "discurso oficial" de los candidatos. "Hay riesgo si no repiten lo que los políticos dicen habitualmente, porque puede que la opinión pública no tenga otro contacto con la política."

Las opiniones se dividen cuando se buscan los posibles efectos perjudiciales de "Gran Cuñado". Según Hugo Haime, sólo deberían preocuparse los políticos que ya tienen baja aceptación: "Toda broma reporta tanto lo positivo como lo negativo de una persona. Lo negativo se refuerza cuando ya existe una mala imagen".

Carlos Fara coincide en este punto, aunque cree que la diferencia pasa por la naturaleza del electorado de cada candidato. "Uno puede tener una imagen baja, como los Kirchner, pero alta fidelidad de sus votantes. El problema pasa por electorados más volátiles, como el de Cobos, más sensibles a una influencia negativa".

Julio Cobos

En el acto de inauguración de una planta de fabricación de productos agropecuarios, el vicepresidente Julio Cobos aseguró que su imitación en el sketch "Gran Cuñado" no lo hizo sentir incómodo, pero que "a nadie le gusta verse caricaturizado".

"Cuando uno ve el personaje , obviamente ve una caricatura. Uno puede decir que te gusta un poco más o un poco menos. Creo que el personaje está ajustado en la voz, lo veo un poco más gordito y en la conducta no me veo muy favorecido", sostuvo Cobos.

"No me veo yo con esas cualidades y condiciones. Espero que repunte en las próximas presentaciones", dijo el vicepresidente.

Cobos visitó una nueva planta de fabricación de productos agropecuarios en Cañada de Gómez, Santa Fe; y habló con la prensa local. Consultado sobre su visión del Frente Progresista en esa provincia, dijo: "se viene consolidando en el gobierno, al frente del Poder Ejecutivo provincial y ahora lo hace en las elecciones legislativas. Creo que es un buen ejemplo de concertación y de convivencia de distintos sectores políticos: hermanados en cosas comunes".

La campaña. El vicepresidente elogió el tono que Néstor Kirchner tuvo ayer, en el acto de lanzamiento de los candidatos oficialistas. "Creo que ha sido moderado el presidente del PJ, cosa que es bueno", sostuvo Cobos, en un comunicado difundido por la Dirección de Prensa del Senado.

"La gente está esperando propuestas de las campañas, no agravios", dijo el vicepresidente. También aseguró que las próximas elecciones son "trascendentes porque consolidan la democracia". Y agregó: "[Las elecciones] nos dan la posibilidad de vivir en un país más republicano, más federal".

"Esta elección no tiene que ser un trauma", dijo Cobos. "Luego hay que interpretar los resultados. Si es de apoyo al Gobierno, consolida el rumbo; y si no lo es, se tendrán que replantear ciertas cosas".

Fuente: La Nación